El gobierno retira la reforma a la ley 30 para armarse.

Por: Waili Gamboa

La educación del país necesita una reforma, pero la que proponía el gobierno, tal vez no era la más adecuada.

A continuación algunos puntos que generan  preocupación:

I)                    Que la empresa privada pueda invertir en las universidades públicas: Según el presidente Juan Manuel Santos, esto permitirá que las empresas públicas que tienen un presupuesto limitado y reducido reciban dinero  de las empresas privadas, pero, la financiación de las universidades públicas debe ser una obligación de estado. Una fuerte inversión en educación pública no sólo propicia el crecimiento económico, sino al crecimiento de sociedades mas igualitarias y mas democráticas

II)                   La Molestia de las universidades públicas: Y con toda razón, ya que el gobierno habla de cobertura, pero ¿y la calidad? con el la educación se busca el acceso a el conocimiento, la ciencia, la técnica, pero sin presupuesto es imposible. En el 1990, el 85%  del presupuesto de las universidades públicas la invertía el estado, en el 2008 tan solo el 49% y por estudiante aportó $3.700.000

III)                La Privatización de la Educación: Esto, convertirá automáticamente a las universidades en empresas comerciales… esto sería tan solo mercadeo, y la ciencia y la educación no pueden depender del ciclo de la economía.

La educación se jerarquizará y solo será para ricos y personas que puedan pagar las matriculas, por ende el conocimiento se presentará solo para clases altas, mientras el resto de jóvenes tendrán buscar otras formar de sustentarse en su vida profesional, entonces, sería hacer un retroceso, no solo de la educación sino de época, sería regresar al siglo XIX, aquella época en la que los ilustrados de América eran solo aquellos que tenían la dinero para irse del país y estudiar.

El Partido de la U y el Partido Liberal, principales aliados del gobierno, piden que retiren esta reforma ¿por qué? porque es una reforma anticonstitucional, y anti popular, además no tenia ningún soporte. Ahora, la reforma fue retirada, pero los Colombianos no podemos bajar la guardia, se retiran, para armarse, el próximo año volverán con otra reforma mas armada y mas difícil de tumbar.

Perdieron una batalla…pero no la guerra.