Por: Waili T. Gamboa Martínez.
Los historiadores del siglo XIX se
relacionaban con la problemática de Las posiciones bipartidistas.
El proceso de independencia motivó la
aparición de la primera historiografía en Colombia. Manuel Restrepo fue el
historiador destacado de este proceso, narra en orden cronológico lineal,
justifica y legitima la ruptura con la metrópoli española.
Después de la independencia, surge Joaquin
Acosta, quien deseaba situarse en una amplia perspectiva temporal, escribir la
historia desde el momento del descubrimiento.
La historiografía medieval surge a mediados
del siglo, siendo crítica respecto a la época colonial, el carácter
centralista, monopólico, fiscalista, intervencionista del estado Español y la
iglesia.
“La época liberal se forjaba críticamente su
propio pasado”[1].
Los liberales buscaban romper con la herencia
del pasado colonial, para construir un nuevo país.
La historiografía conservadora aparece en un
momento de crisis, lo que provoca que los historiadores conservadores se
devuelvan al pasado para encontrar el motivo de la crisis del presente y
rescatar lo que fuese necesario para tener un país ordenado y en paz.
Rescataron la esencia católica, las buenas costumbres, la moral, el respeto y
la obediencia a la autoridad.
El enfoque de la historiografía conservadora
se sustenta en el postulado de que “los factores individuales deben estar
supeditados al universo institucional del Estado y la iglesia”.[2]
Las historiografías liberal y conservadora se
movían en el campo de la historia político- institucional, sin embrago, surgen
otras historias que abordan otros temas, como las de carácter económico, de
comunidades indígenas, de historia regional, historias que trataban de tópicos
de la cultura y la ciencia. También encontramos biografías, algunas
recopilaciones de documentos, relatos, y sobretodo, crónicas.
Por el ambiente político por el que
atravesaba Colombia (Guerra de los mil días y separación de Panamá) era
necesario reforzar la nacionalidad, trabajo a cargo historiadores, quienes
recataron las tradiciones y ejemplos de los “grandes hombres” que han hecho
historia.
Surge una nueva historia que propone
despojarse de cualquier interpretación partidista o religiosa para buscar una
objetividad, considerando que “la verdad de los hechos está en los hechos mismos”[3].
En los años 30 hay una renovación
historiográfica que se caracteriza por el estudio de lo económico y social.
Esta renovación se debe al avance del
capitalismo, que trae consigo una nueva problemática y económica y social y al
ambiente intelectual del momento que permite que la Historia se encuentre con
otras corrientes de pensamiento, como la sociología, el marxismo y la economía.
La interpretación liberal de la historia
donde se valoran positivamente los periodos donde las instituciones y los
hombres han estado al servicio de la política de justicia social y trabajan en
función de las clases populares,
La interpretación conservadora valora de
forma positiva la época colonial, las funciones del Estado y la iglesia y la
apreciación de lo hispano-católico.
En los sesenta empieza una renovación en la
investigación histórica. “Para los nuevos historiadores un rasgo bastante
generalizado lo constituye la superación de las tradiciones determinaciones de
partido, religión, clase, etnia, familia, etc”[4].
Se abren nuevos campos de investigación a la
historia y surge un auge historiográfico: Historia colonial, social, la
historia del movimiento obrero y sindical, la historia política, historia
económica.
Bibliografía:
TOVAR ZAMBRANO, Bernardo. Nueva historia de Colombia. Vol IV (La
historiografía colombiana). (Editorial). (Lugar y año de publicación).
[1] TOVAR
ZAMBRANO, Bernardo. Nueva historia de
Colombia. Vol IV (La historiografía colombiana). (Editorial). (Lugar y año
de publicación). Pág. 201
[2] TOVAR
ZAMBRANO, Bernardo. Nueva historia de
Colombia. Vol IV (La historiografía colombiana). (Editorial). (Lugar y año
de publicación). Pág. 202
[3] TOVAR
ZAMBRANO, Bernardo. Nueva historia de
Colombia. Vol IV (La historiografía colombiana). (Editorial). (Lugar y año
de publicación). Pág. 204
[4] TOVAR
ZAMBRANO, Bernardo. Nueva historia de
Colombia. Vol IV (La historiografía colombiana). (Editorial). (Lugar y año
de publicación). Pág. 207
buenas tardes, disculpa tu sabes si se consigue este libro en digital???
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